1997
Sergio fue el primer Ángel que María Álava observó desde el cielo, una soleada mañana del 30 de marzo de 1997, y el primero del que se encargaron plenamente los herederos de María: Ana María Arregui, su sobrina, y su marido Miguel Ángel Vallejo. Niño alegre y despierto, como su predecesor, fue un ángel zurdo, que portó el banderín con la mano derecha y se santiguó con la izquierda. Su cara de travieso e inquieto era un fiel reflejo de la realidad. Poco antes del día del ángel, Sergio se cayó de su bicicleta y se hirió en una pierna, recibiendo bastantes puntos. Esto no fue ningún impedimento para que todo fuera con normalidad y Sergio realizara su papel a la perfección, aunque seguro que dio un gran susto a todos los que le rodeaban.